Os dejo esta receta de galletas con chips de chocolate, muy fácil de hacer. Básicamente hay que mezclar los ingredientes y hornear. No hay ni que reposar la masa. Podéis usar chips de chocolate ( por ejemplo de marca Hacendado) ó si tenéis una tableta de chocolate lo trocéais en trocitos pequeñitos. En ambos casos están riquísimas. Igualmente podéis usar azúcar blanco y/ó moreno.Sobre la mantequilla, sacarla del frigorífico unos minutos antes ( en mi cocina suele hacer calor y con ese tiempo es suficiente). Es mejor que esté dura a que esté demasiado blanda. Os aconsejo no fundirla en el microondas ( después de batirla quedaría la masa demasiado pegajosa).
INGREDIENTES ( para unas 20 unidades):
1 huevo M
65 gramos de azúcar moreno ( si no tenéis pues usar solamente azúcar blanco)
65 gramos de azúcar blanco
65 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
170 gramos de harina
1 cucharadita de esencia de vainilla. Mi receta la puedes ver aquí
65 gramos de chips de chocolate ó de trocitos de chocolate
Media cucharadita de bicarbonato
ELABORACIÓN:
Batir el huevo con las varillas eléctricas ó con pala si tenéis una máquina que incorpore ese accesorio. Añadir el azúcar y batir hasta que quede bien mezclado. Incorporar la mantequilla a dados y batir hasta que la mantequilla no se note. Añadir la esencia de vainilla. Tamizar la harina con el bicarbonato. Añadir y mezclar suavemente. Añadir por último los trocitos de chocolate ó chips y mezclar.
Precalentar el horno a 180 grados. Poner papel de horno sobre la placa de hornear que vayamos a usar e ir colocando montoncitos de masa, separados. Los aplastamos un poco con la mano si queremos que salgan las galletas más planas. Podemos poner ahora algún trocito de chocolate encima de forma que cuando las galletas se horneen éstos trocitos sobresaldrán un poco.
Introducimos la placa en el horno y horneamos unos 14 minutos. Sacamos la placa, esperamos un par de minutos y ayudándonos de una espátula de cocina o similar pasamos las galletas con mucho cuidado a una rejilla para que se enfríen ( las galletas estarán todavía calientes y blanditas).

Al enfriarse endurecerán un poquito.
Y a comer!!!
¡Que buena pinta tienen!
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